jueves, 10 de abril de 2014

MARÍA JOSÉ, NIÑA PRODIGIO DE LA DECLAMACIÓN



NIÑA PRODIGIO DE LA DECLAMACIÓN

EL  VIII ENCUENTRO INTERNACIONAL DE POESÍA "VALLE DE IRAKA", tiene el privilegio de contar con la niña prodigio de la declamación MARÍA JOSÉ MOLINA, ganadora de numerosos concursos nacionales y dueña de una especial sensibilidad para el arte declamatorio.


RESEÑA MARÍA JOSÉ MOLINA SOSA

DECLAMADORA:


Nació en Medellín el  10 de septiembre de 2002.  Edad: 11 años.

Ø  Estudiante del VI Grado, Institución Educativa María Auxiliadora del Municipio de Caldas Antioquia;  desde los cuatro años de edad, mostró su inclinación por la poesía y la declamación,  participando en un sinnúmero de actividades comunitarias y sociales, haciendo de  las letras y el verso su vocación,  la poesía universal ha sido su fuente de inspiración.


Ø  Ganadora de cinco premios nacionales como Declamadora de la Poesía Universal:

Ø  Invitada especial al VII ENCUENTRO INTERNACIONAL DE POETAS EN  PARIS (Octubre de 2013)

Ø  Participante en el VI ENCUENTRO INTERNACIONAL DE POESIA “VALLE DE IRAKA”, Boyacá , 2 al 5 de mayo de 2013.

Ø  Primer Puesto en el XXI Concurso Nacional, “El Caratejo Vélez”, Titiribí Antioquia, abril 28 de 2012.

Ø  Primer Puesto en el XXIV Concurso de Declamación del Verso de Oro, en Ramiriquí, Boyacá, Categoría Infantil, noviembre de 2012.

Ø  Segundo  y Tercer Puesto, categoría Juvenil,  XX y XXI Concurso Nacional de poesía y  Declamación ORO DE GUACA, en Chinú (Cordoba), 2012 y 2013.

Ø  En su amplio Repertorio, encontramos obras de: Juana de Ibarbourou, Gabriela Mistral, Manuel Benítez Carrasco, Miguel Hernández, Afonsina Storni, José Mártí, Juan de Dios Peza, Manuel Benítez Carrasco, Julio Flores, Chang Wu-Kien,  Pablo Neruda, Benedetti,  Ángela Penagos, Omar Gallo, Antonio Comas (Indio Duarte), Fernando Cely Herrán Ernesto García Mejía, entre otros.

Ø  Algunos Eventos donde ha participado: Mujeres en 3D Televida, TODELAR RADIO, La Z URBANA, MUNERA ITSMAN RADIO Noticias de Speedy, GALAXIA FM, FM ANDINA, TELEANTIOQUIA NOTICIAS, TELE ENVIGADO, TELEBOYACA, Galaxia estéreo, Andina Estéreo, Colombia Canta y Encanta, Veladas poéticas “Rotonda Cultural” Itagüí, 2010 al 2012. *Veladas literarias y poéticas, Biblioteca José Félix de Restrepo Envigado. *Invitada especial, al  Concurso Poético Municipal intercolegial de Caldas 2010 al 2012. *Edición N° 98 del “PEQUEÑO PERIODICO” Parque Biblioteca de Belén. *Velada poética Gotas de Tinta, Aula Internacional de Medellín. *Encuentro Metropolitano de Derechos Humanos. “Noche de luna, música y poemas”, Municipio de Betania, Antioquia. *Recital Poético en Santa Fe de Antioquia, Museo Juan del Corral.  Auditorio casa de la cultura LA BARQUEREÑA, Corregimiento de Altavista, Fiestas Barriales en Caldas, *Recital poético, septiembre, 20 y 21 en Frontino, Fiestas del Aguacero 2012, Caldas Ant.Velada poética de Santa Fe de Antioquia, Museo Juan del Corral 2012. Encuentro de Poetas.  Recital Poético Municipio de –Concordia Ant.  Parque Obrero Itaguí Día Internacional de la Mujer, 2013. Universidades, colegios, asilos, Clausuras de eventos organizados por la Personería de Medellín, Personería de Medellín, Juanes por la Paz con la corporación mi Sangre,  Encuentro de solidaridad con Cuba,Entre muchos otros,

RECONOCIMIENTOS:

Ø  2013: PRIMERA EMBAJADORA CULTURAL del Municipio de Caldas Ant.
Ø  Reconocimiento a los mejores de Caldas 2013,  Concejo Municipal
Ø  Reconocimiento de la Velada Músico poética de Caldas Ant

Ø  La Rotonda Cultural  de Itaguí.

Ø  Reconocimiento como artista  por sus logros de parte del doctor Rodrigo Saldarriaga del Pequeño Teatro, Rotonda de Itaguí

Ø  La Velada “Martes de Poesía y Música de Envigado” y la biblioteca “José Félix de Restrepo”, “por la firmeza de su palabra y excelente dicción en el arte de la declamación”.

Ø  Centro Educativo Rural el Cano de Caldas Ant-, Institución Educativa María Auxiliadora de Caldas Ant-

Ø  Concejo Municipal de Itaguí Ant. 2012

Ø  Mesa de la Palabra Envigado, revista Viguerías

Ø  Institución Educativa María Auxiliadora de Caldas Ant.

Ø  I.E Concordia Antioquia, encuentro de poetas, entre otros.




Mayor Información: EDUARDO JOSE MOLINA HURTADO
TEL. 314 735 76 79









Orgnización sin ánimo de lucro para la invesigación y la difusión de las artes y la ciencia
bOYACA – COLOMBIA - SÁBADO, 23 DE FEBRERO DE 2013
UN EJEMPLO


María José la niña prodigio de la declamación invitada al VI ENCUENTRO DE POESÍA "VALLE DE IRAKA". Su actuación alcanzará máximo esplendor en el homenaje nacional al poeta colombiano Fernando A. Cely y en la noche de apertura del evento, compartiendo escenario con el escritor colombiano FERNANDO SOTO APARICIO.
La estudiante del Colegio María Auxiliadora de Envigado  desata tormentas espirituales en los espectadores por la forma como ondula su voz con sinuosidades asombrosas en evocaciones profundas de la condición humana desde los versos de Alfonsina Storni, Gabriela Mistral, Miguel Hernández, Neruda. Hay en esta niña el encanto y el misterio, evidente en su tierna mirada y la fina inteligencia de una estudiosa del arte declamatorio.

María José actuará en las instituciones educativas de Sogamoso, Summuxi, Libertadores, Silvestre Arenas y en Firavitoba,  Iza y Tota. Será el centro de atención por su capacidad histriónica y la seriedad al abordar el arte declamatorio. Cuenta para ello con un padre de gran calidad humana y esmerado para atender las peticiones de su hija de manera especial en su formación estética. El poeta Fernan A.Cely  sentirá feliz al ver   esta niña prodigio de la declamación.
 Por. Poeta y Escritor ALONSO QUINTIN GUTIERREZ RIVERO.


EL DELIRANTE SORTILEGIO DE LOS VERSOS
Por: Alonso Quintín Gutiérrez Rivero

“Nunca podré saber lo que amé en ella;
si su esquiva lejanía de estrella
o la rara ternura de su acento”

Enrique Escallón Camacho.

La poesía, esa extraña forma del pensamiento, hecha melodía y sortilegio, hace su tránsito desde el inconsciente, trayendo imágenes, sonoridades y visiones  forjadas en el misterio del ser, para conmover, transgredir y tocar lo humano con insólitos oleajes de infinito, “A toda sensibilidad corresponde, de hecho, una forma de pensar y comprender el mundo y viceversa, no se concibe un pensamiento al que no corresponda una sensibilidad”, afirma Eduardo Gómez. La poesía es, entonces el lugar de las emociones donde habita la tragedia existencial del hombre con todos sus sobresaltos de ternura, placer, tristeza y dolor.

Asistimos al CONCURO DE DECLAMACIÓN EL VERSO DE ORO 2012, con su cábala de sorpresas, esperas y desengaños, con una devoción sin límites. El arte declamatorio, se tomó el escenario en medio del fervor de la comunidad, en medio de un vendaval de emociones, ecos al fin y al cabo de lejanas premoniciones donde cabían el valor, el coraje, la desdicha y los rumores desatados por el triunfo,  tras cada actuación en el delirio ingente de la poesía.

Declamadores procedentes de muchos lugares del país, llegaron escuchando el jubiloso empeño de la conciencia por perpetuar sus nombres,  en el libro inmortal de los vencedores. Venían del país de los sueños, apretujados de silencios y de ecos lejanos de traviesas doncellas tal vez del palacio de los Césares. Pero el triunfo es esquivo y frenético, un pequeño trastabilleo, un acento de más, un paso sin plan, un ademán imposible, una mirada sesgada, una exclamación rompiendo la armonía, una entonación sin oleajes, sin vientos siderales, sin matices profundos donde se adivinen las turbulencias del alma; una ecuación donde la soledad del declamador, entrecruce las luces de la tragedia, el drama existencial, la ternura, el amor, la burla, la ironía  y el sarcasmo. Aquí un pequeño desliz es un abismo. La emancipación del espíritu, ha de ser total. El declamador, solo tiene un momento de lucidez extrema y si ese momento asoma en el escenario, todo es esplendor y armonía. Podrá acabarse la espada del tiempo en cada verso, pero si el declamador, se declara invencible y lucha con su cerebro en el portal de las emociones, podrá entregarnos el alma y el magnetismo de su transfiguración espiritual para vibrar con el poeta en el corazón de los asistentes, en la fábula de la existencia humana. No se espera del declamador que sea Dios en la escena, pero Dios guiará su ademanes hasta hacerlos vibración del más allá. No se espera lo imposible, pero la inmortalidad de un ademán puede habitar para siempre en el alma de los asistentes. El objetivo del declamador, aunque no se lo proponga, es tocar como una fuga de oro, la sensibilidad de quien lo ve y lo escucha en el silencio de una abstracción sublime, porque el público está predispuesto a ese trance, a ese encuentro fugaz entre la vida y la muerte de un verso que atraviesa los sentidos en busca de otras melodías, tal vez las mismas que habitan desde el principio del mundo en todo ser humano, con persistente obsesión de locura y amor. El declamador asciende las escalinatas a encender la antorcha del misterio, a tocar el laúd con mano diestra. En su ser se perfila la constelación de Orión. En su glorioso ascenso, ha de auscultar su luz interior, ascender paso a paso con pasión, olvidando los tremedales,  de la mundana estrechez,  sucintando arpegios, convocando, ninfas, invocando himnos triunfales mientras se viste de grandeza. El declamador, es convocante de preguntas, oficiante en las alturas donde perdura lo imperecedero, lo abrupto, lo insospechado, lo convulso, lo extremo, lo delicado y lo cruel.  

Los declamadores poblaron la escena de personajes venidos de más allá de la conciencia, más allá de honor y la desgracia. Por las sutiles cuerdas de los sentimientos se deslizaron versos de protesta,  amor, desengaño, perplejidades de la ingenuidad y valentía bautismal en  el costumbrismo; esplendores eternos en el lirismo, y no pocas expresiones de èpicas delicias en demoledoras evocaciones de la tragedia humana.

Aunque la mente no retiene lo efímero del tiempo, voy a intentar una aproximación al tocado de los dioses en el manto frágil del recuerdo.

Encanto de palacios encantados, gatos parlanchines, sutiles mariposas, cielos despejados y príncipes azules. Aquí el concurso se aproxima al alma infantil con la elocuencia de un sabio y la paciencia de un naviero. Rostros de niños, atizando verdades eternas con la varita mágica de su imaginación. Veamos.

Felicitaciones. Nos hallamos frente a la opción de lo posible. Los talleritas tienen el faro del éxito a la distancia. En ellos hay grandes esperanzas en el intricado arte de la declamación. En estos niños la espontaneidad y la academia juegan a favor de la esbeltez del pensamiento creativo.

CATEGORÍA INFANTIL.

Una incursión a esta categoría, nos conmueve el azar de una rutina cincelada con devoción en la quietud de los hogares, o en esos sitios donde se forja el declamador tras un esfuerzo que requiere concentración, trabajo, ensayo, y una gran dedicación. A pesar de ser niños, se nota una gran seriedad al abordar los temas, sobriedad en la representación, delicadeza y un esmerado cuidado en la administración de la voz, como recurso de comunicación. Cada gesto aquí dilucida el gran enigma de la vida, como adivinando  qué hay más allá de la verdad. Quizá sea ese el homenaje de los niños a su pueblo, “Noble ciudad, venero de la raza/ que vigilan insomnes las estrellas” (José Domingo Arias Bernal “Canto a Ramiriquí”. Hallamos aquí el sendero por donde viajarán las próximas generaciónes a tallar los laureles del éxito. Aquí solo hay franqueza, beatitud, ternura, y el asomo de una tempestad parecida al destino donde viven las estrellas, donde “cada piedra es santuario del espíritu”.

1.     María José Molina Sosa, de Medellín. No sé de dónde proviene esa capacidad histriónica y su versatilidad interpretativa. Seguramente del encuentro con lo aparente y lo profundo del poema. Seguramente de la búsqueda de la perfección. Denota oficio y seguridad. No más, no menos, como quien entiende  los abismos y se separa de ellos para no caer. Sugerencia: subir la intensidad interpretativa desde la perspectiva de las emociones, como si cada oleaje acariciara la tragedia existencial.


La poesía asoma sobre los abismos del conocimiento en franca libertad contra la obviedad. Se percibe como un vuelo sobre la neblina del ser. Los declamadores fueron convocados, bajo la égida del águila del bullicio y la austera materialidad. Aquí llegan los consagrados y los iniciados a oficiar el mismo ritual: convocar una nueva estética de la vida, desde la tempestad del declamador, puesto en vilo por el mar embravecido de las emociones. “Soy la oscura mitad de tu existencia/ fruto de llanto abierto en la penumbra/ alondra vegetal que se acostumbra/ a la rama con sangre de tu ausencia”. (Carlos Martín).

En ese lugar apacible, donde suelen pintar los luceros en el alba serenatas de mujeres encantadas,  allí venció la aurora su delicioso aroma y se quedó pensativa la mañana, “allí donde hermosos sueños pintábamos en el agua/ en los espejos de plata tan puros como mi alma…/” allí, en Ramiriquí, la poesía se desgrana en versos desde los labios de los declamadores.




“Yo no tengo confidencias que legaros,
He visto,
Vuestras sombras azularse en la bruma.
He visto vuestro ojos sembrar luces de espanto”
Los versos de Germán Espinosa, alumbran este claroscuro de evidentes melodías donde la lírica hizo su tránsito.


“Aquel cuyo rostro no irradia luz nunca será estrella”.
Con esta sentencia, William Blake, nos aproxima a la sinceridad, a la honradez en la palabra y en el sentir. Quizá el declamador es todo eso, la síntesis de lo humano y lo divino en el momento sublime de la interpretación. Ahora, llegar al lugar abscóndito del ser donde abunda el caos y de donde surge la poesía es un propósito que requiere perseverancia, esmero y mucha paciencia para la interpretación. Ese es el trabajo del declamador. Iniciar la posesión de lo desconocido. Indagar por sus adentros, sus contradicciones, sus pasajes siniestros y los lúcidos. En la interpretación de la poesía costumbrista se ha de estudiar a más del texto, las situaciones, los desvaríos y la placidez de los arroyos que hacen cantar el alma alborozada.

COSTUMBRISTA MAYORES.

Con un nivel que sobrepasa la admiración, el concurso exhibió tal exuberancia y talento que solo delgadas líneas interpretativas, marcaban la diferencia.

En las borrascas de las pasiones  humanas, la poesía cumple el destino de afinar las cuerdas del espíritu, para dejarnos abandonados en el silencio de los interrogantes, ante las delicias divinas, sería por eso que el poeta dijo “Nunca perdió más el tiempo el águila, que cuando escuchó los consejos del cuervo”.  Nos adentramos ahora en ese pasaje sórdido y luminoso del destino del poema desde la lírica. A estas alturas, el concurso,  avanza transitando la noche con pies descalzos, en la sublime expresión de lo perfecto.



Felicitaciones a los participantes, de quienes hemos aprendido la humildad del deber y la majestuosidad del arte declamatorio. Ellos hicieron grande el certamen e iluminaron el sendero tortuoso de la poesía donde abundan los dolores miserias y alegrías del ser humano. Esto fue cuanto vimos y sentimos, porque como dice el poeta “Libremente los besos desde los labios caen en el mar como perlas inútiles”.

En cumplimento de la tarea encomendada por el comité organizador del  XXIV CONCURSO NACIONAL DE DECLAMACION, como jurado estas son nuestra humildes apreciaciones.

Felicitaciones a todos,

Gracias,

Alonso Quintín Gutiérrez Rivero.
Sogamoso, noviembre 14 de 2012.